martes, 6 de julio de 2010

La playa, el sol, la brisa suave.

Hace días que no escribo. Estoy en otras cosas, digamos que me encuentro mirando en dirección a mi, el único lugar desde el que "me doy cuenta" de lo que ocurre conmigo y a mi alrededor". 
Estos días de verano son maravillosos. La playa, el sol, la brisa suave, templada, el agua. Todo acaricia mi cuerpo, esta expresión es literal, con el bikini la mayor parte de piel esta al aire ¡¡¡¡¡es espectacular!!!!. 
Siento una sensación de libertad, ligereza y alegría interior que es difícil de describir.
Soy afortunada, sin duda ninguna, tengo de todo, pues ningún deseo tengo. Disfruto mucho con mi fortuna, que consiste en mi principalmente, familia con, todos los que estuvieron antes y los que siguen aquí, mis amigos, mis aficiones, estudios, trabajo ..... etc. No sobra nada y tampoco me falta, estoy al completo ¡¡¡¡que bien!!!!. Sin esfuerzo, sin lucha.
En el día a día, las circunstancias se suceden una tras otra, unas agradables y otras no tanto (como es lo normal en este universo dual). Aun y con todo hago lo que tengo que hacer, con seguridad. Si, si, si, esa es la sensación que experimento "seguridad" y también confianza de que todo lo que esta en mi camino vendrá sin hacer yo nada, ni dejar de hacerlo tampoco, lo mismo si me da por encerrarme en un armario como si estoy todo el día en la calle ¡¡¡es maravillosa esta sensación de bien-estar con todo!!!!! sea lo que sea.
Claro esta que tengo el convencimiento que los elefantes para mi ya pasaron. Gracias a Dios.

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